Neoptólemo y los Eácidas


Neoptólemo es hijo de Aquiles y Deidamia, la hija del rey Licomedes, también fue llamado Pirro (Apd. III 13; Hom. Od. XI 491). Aunque sobre su paternidad no hay dudas, en algunas versiones su madre es Ifigenia, hija del rey Agamenón (Tzetzes comentario a Licofrón 133; Eustacio a Hom. 1187: espués del (no)sacrificio de su (no)madre en Áulide es llevado por su padre (Aquiles) a la isla de Esciros, donde reina Licomedes). El nombre de Pirro se dice que le ha sido dado por Licomedes,  debido a que tenía el pelo rubio o porque Aquiles, cuando se disfrazó de niña, había recibido el nombre de Pirra.

Llegado a Troya dirige a los Mirmidones en la batalla y se gana la admiración de los aqueos cuando consigue matar a Eurípilo, hijo de Télefo el heráclida y de Astíoque. Éste era un príncipe de Misia (Asia Menor) que había llegado en ayuda de los troyanos y avanzaba de forma implacable hacía el campamento griego con el objetivo de incendiar las naves, de la misma manera que lo había intentado Héctor en la Ilíada. Eurípilo ya había acabado con la vida de Macaón hijo de Asclepio y de Nereo cuando, tras un enfrentamiento cuerpo a cuerpo, Pirro consigue derrotarle. Los griegos impresionados por la valentía exhibida a pesar de su corta edad comienzan a llamarle Neoptólemo, el "joven guerrero".


Neoptólemo mata a Eurípilo, ánfora ática de figuras negras
La misma profecía que exige que Neoptólemo participe en la guerra también había proclamado la necesidad del arco y las flechas de Hércules para vencer a Troya. Éstos se encontraban en posesión de Filoctetes, abandonado años atrás en la desierta isla de Lemnos, después de haber sido mordido por una serpiente. La herida desprendía un hedor nauseabundo tan intenso que nadie era capaz de soportar. Ulises y Neoptólemo con la ayuda  de la aparición fantasmal de Hércules, convencen al arquero para seguirles a la guerra de Troya (Sófocles, Filoctetes).

A pesar la llegada de Neoptólemo y Filoctetes, la toma de Troya se resiste. El adivino Calcas aclara que lo que él había dicho era solo parte de la profecía y que la respuesta completa la hallarían en el bosque del monte Ida, cerca de Troya. Neoptólemo y sus hombres van hasta allí y capturan al príncipe Héleno, quien, tras la muerte de Paris a manos de Filoctetes, había sido expulsado de la ciudad a causa de una pelea con su hermano Deífobo, pues ambos querían casarse con Helena, la  viuda del difunto Paris. Erraba fuera de la ciudad en solitario. Heleno es llevado al campamento griego donde, en venganza contra su gente por haberlo desterrado, les revela la segunda parte de la profecía a sus enemigos: sólo si eran traídos desde la ciudad de Olimpia los huesos de Pélope (hijo de Tántalo y abuelo paterno de Agamenón y Menelao) y la estatua de Atenea, el Paladio de Troya, podrían los griegos finalmente vencer. Heleno, mellizo de Casandra, tenía el don de la profecía pero a él sí le creían. 

Víctimas de Neoptólemo en la Guerra de Troya:

- Eurípilo, hijo de Télefo de Misia

- Agenor y Pólibo, hijos de Antenor, el troyano afín a los griegos

- Alcidamas y Melaneo, hijos de Alexinomo de Cauno

- Antífono, Polites y Pammon, hijos de Príamo. Además habría que añadir al propio rey y después del saqueo de la ciudad a los príncipes Polidoro y Polixena.

- Astinoo, hijo de Protaón.

- Celtus y Eubio, hijos de Meges.

- Coroebo de los Bébrices, prometido de Casandra.

- Hipomedón, hijo de Hípaso.

- Menalcas, hijo de Medón.

- Menes, hijo de Casandro de Licia.

- los frigios Hipomedón, Moris y Laodamas


Con los guerreros recién llegados, las reliquias en poder de los aqueos y la construcción del caballo de Troya, se desencadenan una serie de sucesos que terminan con la interiorización del caballo de madera en la ciudad.

El hijo de Aquiles es uno de los guerreros que entran en Troya escondidos dentro del famoso caballo de madera. En el palacio real donde acaba con la vida del rey Príamo, sobre el altar de Zeus.  También elimina al hijo de Héctor y Andrómaca, Astianacte:

      - da muerte al infante lanzándolo desde lo alto de una torre de la ciudad.

      - no fue muerto, sino que llega a adulto y funda una nueva Troya junto a Ascanio, hijo de Eneas.

En reconocimiento a su valor, además de muchos tesoros, le fueron entregados la propia Andrómaca, mujer de Héctor, y al príncipe Héleno en calidad de esclavos.


Rapto de Polixena por Pío Fedi, Loggia dei Lanzi, Florencia

Antes de partir de Troya, Neoptólemo sacrifica a la princesa Polixena, hija de Príamo ante la tumba de Aquiles (Eurípides, Hécuba).

La muerte de Pirro:


Después de la guerra de Troya, Neoptólemo no regresa a Esciro con su madre, sino que se instala en Ftía junto a su abuelo paterno Peleo, influído por las profecías de Heleno. Se casa con Hermíone, hija de Menelao y de Helena, reyes de Esparta. Pirro con Hermíone no tienen descendencia, pero  con Andrómaca tiene tres hijos Moloso, Píelo y Pérgamo, el más joven. Heleno también tiene un hijo, Cestrino, con Andrómaca después de la muerte de Pirro en Delfos.

Hermíone había sido prometida a Orestes, hijo de Agamenón, caído en desgracia. Su hermana Electra escondió a Orestes de Egisto y Clitemnestra, usurpadores del trono, y muchos lo creyeron muerto.  Por esa razón, Menelao casa a Hermíone con Neoptólemo, sin llegar Orestes a saberlo.

Después de su matrimonio, Neoptólemo se dirige a Delfos, con tres posibles motivos:

    - saquear el templo de Apolo, causante de la muerte de su padre, Aquiles
    - ofrecer el botín obtenido de Troya

    - como Neoptólemo no conseguía tener hijos con Hermíone, se dirige preocupado al oráculo de Delfos para pedir consejo.

Hermíone, la esposa legítima y celosa trata de dar muerte a Andrómaca durante la ausencia de Neoptolemo en Delfos. El anciano Peleo defiende a Andrómaca contra Hermíone y su padre Menelao.

En Delfos Neoptólemo se encuentra con Orestes, quien lo mata delante del altar de Apolo (Eurípides, Andrómaca), instigado por la sacerdotisa de Apolo o por su compañero Pílades, bisnieto de Foco, el hermanastro asesinado de y por Peleo. La historia es muy consistente por el antiguo odio de Átridas y Focidios a los Eácidas. Neoptólemo es enterrado dentro del recinto sacro de Delfos y cada ocho años se celebran festivales en su honor.



Reyes Eácidas de Epiro:


Los Eácidas continúan la línea real en Epiro. Aquí llega Andrómaca, viuda de Héctor, casada con Heleno tras la muerte de Neoptólemo, acompañada de sus hijos. 


Moloso, hijo de Pirro, hereda el reino después de la muerte de Heleno y es el el héroe epónimo de la región de Molosia. 

Cestrino con voluntarios Epirotas toma posesión de la región más allá del río Thyamis. 

Pérgamo cruza a Asia y mata Ario, déspota en Teutrania , quien lucha con él en combate singular por su reino. Da su nombre a la ciudad que todavía lleva su nombre. Su madre Andrómaca lo acompañó, todavía hay un santuario en la ciudad dedicado a su memoria. 

Reyes desde Neoptólemo - Epiro desde Pirro hasta Pirro de Epiro
Píelo permanece en Epiro y es el antepasado mítico de los reyes de Epiro hasta Pirro y Alejandro Magno. Desde Pirro, hijo de Aquiles, hasta el rey Taripo de Epiro, hay quince generaciones (Pausanias I, 11). Taripo es el padre del rey Alcetas I de Epiro, quien tiene dos hijos, Neoptólemo I y Arribas (quienes reinan en diarquía al principio y después Arribas con su sobrina Troa, hija de Neoptólemo I). Neoptólemo I es el padre del rey Alejandro el Moloso y de Olimpia la madre de Alejandro Magno. Arribas es el padre de Eácides y abuelo de Pirro de Epiro.

Existe otra genealogía (Plutarco Vidas Paralelas: Pirro): Neoptólemo toma por esposa a Lanassa, hija de Cleodeo, hijo del heráclida Hilo. Tienen un hijo llamado Pirro que se convierte en el ancestro común de la Casa Real de Epiro hasta llegar a Taripo o Tarripas, el padre de Alcetas I. De esta manera, los reyes de Epiro y Alejandro Magno serían descendientes tanto de Aquiles como de Hércules.


La dinastía Eácida reina en Epiro hasta el III a.C.
Después de la muerte de Deidamia II, asesinada en el templo de Ártemis, se proclama la República de Epiro sometida a la dinastía antigónida de Macedonia. Los Eácidas se mantienen una generación más en el reino de Siracusa con Nereis, hermana de Deidamia, casada con Gelón II de Siracusa (Polibio VII 4 ; Justino XXVIII 3 ; Pausanias VI 12,3).