Reinos del Sur de Argos: Prétidas, Melámpidas y Biántidas

Reino de Preto:

Preto es sucedido por su hijo Megapentes, quien cambia su porción de reino (Tirinto) con Perseo, pasando a ser rey de Argos. Éste es sucedido por Anaxágoras, que reina hacia el siglo XIV a.C. y a éste le sucede Ifis, que es destronado brevemente por Tálao el melampódida. Ifis es padre de Etéoclo (que en algunas versiones es uno de los Siete contra Tebas) y de Evadne, mujer de Canapeo (que siempre es uno de los Siete). De Evadne y Capaneo nace Esténelo, que es uno de los pretendientes de Helena y luchará en la Guerra de Troya homérica, de donde traerá a Argos la estatua de Zeus de tres ojos (citada por Pausanias). Capaneo es hijo de Hiponoo, hijo de Megapentes y Astínome, hermana de Adrasto.

A Esténelo sucede Cilárabes, en el siglo XII, que reúne las tres porciones del reino Sur de Argos. Cilárabes muere sin descendencia, a pesar de sus relaciones adúlteras con Egialea, la esposa de Diomedes. El reino pasa a Orestes quien ya era rey de Micenas y de Esparta.

Prétidas

Reino de Melampo

Melampo tiene con Ifianasa (hija de Preto) a Antífates y a Mantio (Od. XV 225), a Abante (Apd. I 9,48), a Biante y a Prónoe (Diod. IV 68,5). Los descendientes de Melampo son adivinos o aúgures.

Antífates casado con Zeuxipe (hija de Hipocoonte de Esparta) tiene a Eclés. Después de Antífates, reina Eclés que sobrevive hasta mediados del siglo XIII. Eclés es compañero de Hércules en la primera guerra de Troya y muere a manos de los troyanos, mientras custodia los barcos. Eclés e Hipermnestra (hija de Testio) son los padres del adivino Anfiarao, que es uno de los Siete. Anfiarao y Erífile (hija del biántida Tálao) son padres de Alcmeón y Anfíloco. Alcmeón es exiliado a causa del asesinato de su madre y por eso, a Anfiarao le sucede su hijo menor. Anfíloco es uno de los Epígonos de las guerras de Tebas, pretendiente de Helena y uno de los combatientes en la guerra de Troya. Muere sin descendencia durante los Regresos y la parte de su reino pasa al prétida Cilárabes.


Melámpidas (Od. XV 222; Apd. I 9,13; Hig. Fab. XIV; Paus. I 43,5)


Videntes del linaje de Melampo:

Anfiarao. Bisnieto de Melampo. Desaparece con su carro durante la Guerra de los Siete. El lugar de su desaparición puede ser Cnopia (Paus. I 34.1), Harma (carro, Paus. IX 19.4) u Oropo (Paus. IX 8.2). Existió un santuario en Cnopia dedicado al oráculo culto de Anfiarao que fue trasladado a Oropo, en la frontera entre Beocia y Ática (Estr. IX 2.10).
 
Anfíloco. Hijo de Anfiarao, después de la guerra de Troya, funda con Mopso un oráculo en Malo, en Cilicia. Anfíloco y Mopso se matan mutuamente en duelo singular (Apd. Ep. 6.19; Estr. 14.5.16).

Clitio. Hijo de Alcmeón y Arsínoe, hija de Fegeo. Huye de Acarnania después del asesinato de su padre por sus tíos maternmos. Los Clitidas son una saga de adivinos de Olimpia (Paus. VI 17.6).

Idmón, vidente de los Argonautas (Apd. I 9.13; Hig.14; Paus. I 42.5), es hijo putativo de Abas (hijo de Melampo) pero su padre real es Apolo (Argonauticas Órficas I 185).

Poliído es hijo de Cérano, descendiente de Abante o de Mantio (Paus. I 34.5). En Creta, Poliido encuentra a Glauco, hijo perdido de Minos, y lo resucita (Apd. III 2.1). En Corinto, ayuda a Belerofonte a montar a Pegaso (Pind., Ol.. XIII 63). En Mégara, purifica a Alcátoo de la muerte de su hijo Calípolis (Ov., Met. II 708). En Tirinto, intenta prevenir a Ífito, hijo de Éurito, que buscaba los caballos de su padre, de su muerte a manos de Heracles (Apd. III 14.2). En Misia, ayuda a Lisipe, madre de Teutrante, a complacer a Ártemis para curar la locura de su hijo, castigado por matar al jabalí de Teutras (Ps.-Plut., Sobre los ríos 21.4). Poliído, casado con Euridamía (hija de Fileo de Duliquio), tiene un hijo llamado Euquenor. Durante la guerra de Troya, intenta evitar que su hijo  acuda a la llamada de Agamenón, donde muere por una flecha de Paris (Il. XIII 663).

Polífides. Mantio, el hijo menor de Melampo (Il. XV 249) tiene dos hijos, Polífides (a quien Apolo concede poderes proféticos) y el hermoso Clito (uno de los amantes raptados por Eos). Polifides profetizó en Hiperesia (Acaya).

Teoclímeno, hijo de Polífides. Huye de Argos y se refugia en Pilos a causa de un asesinato, se convierte en uno de los compañeros de Telémaco, hijo de Ulises. Al llegar a Ítaca, ve un halcón que despluma una paloma que interpreta como el regreso de Ulises (Il. XV 525). En el palacio de Penélope tiene una visión premonitoria de la muerte de los pretendientes (Il. XX 350).

Tiodamante. Después de la desaparición de Anfiarao, los argivos eligen como augur a Tiodamante, hijo de Melampo (Estacio, Tebaida VIII 279, tío abuelo de Anfiarao).

 Reino de Biante:
Biántidas
A Biante le sucede su hijo Tálao, que es uno de los Argonautas. Tálao es muerto por Anfiarao. Le sobrevive su hijo con Lisímica (nieta de Melampo), Adrasto quien, con la ayuda de Ifis el prétida y de su suegro Pólibo de Sición, reconquista su parte del reino. Se produce entonces una reconciliación entre los linajes de los Melampódidas y los Biántidas. Anfiarao se casa con Erífile, hermana de Adrasto. Se pacta bajo juramento que cualquier futura disputa entre Adrasto y Anfiarao, se someterán al arbitraje de Erífile, lo que tendrá desastrosas consecuencias en la guerra de los Siete contra Tebas.

Adrasto sobrevive a la guerra de los Siete contra Tebas y a la posterior guerra de los Epígonos. Tiene un hijo llamado Egialeo y dos hijas, Deípile (que se casa con Tideo de Etolia y es la madre de Diómedes y de Cometo) y Argia (que casada con Polinices de Tebas es madre de Tersandro). Es sucedido por su hijo Egialeo y éste por Cianipo.

Cianipo es el quinto y último rey de la dinastía de Biante. La madre de Cianipo es Cometo, hija de Tideo. Cianipo participa en la guerra de Troya y es uno de los guerreros que se esconden en el caballo de madera. Al igual que Anfíloco, muere sin descendencia, con lo que la mitad del reino de Argos se vuelve a unir en el prétida Cilárabes.

En el siglo XII a.C se extinguen las tres líneas, al morir Cilárabes sin descendencia.