Argonáuticas II: El viaje a La Cólquide


El carnero de oro:

En Yolcos reina Pelias, hijo del dios Poseidón y de Tiro, quien ha destronado a su medio hermano Esón, hijo de Creteo el mayor de los eólidas. Un oráculo ha advertido al rey que se guardara del hombre de una sola sandalia. Jasón, hijo de Esón y Alcímede (Ap. Rd. I 232) es educado por el centauro Quirón (Pínd. Nem. III, 94) hasta que alcanza la edad de 20 años. En el camino de regreso a Yolco (para reclamar el trono de su padre, Diod. IV 40)  ayuda a una anciana a cruzar el río Anuro (Apolonio, Argonautica III 66) Eveno (Higino, Fab. 22) Enipeo (Valerio Flaco Arg. I 83) o Istro (Draconcio Romulea X 57). La anciana es la diosa Hera, quien agradecida le ofrece su protección (Hig. Fab. 13). Al cruzar el río Jasón pierde una sandalia. Pelias, recordando el oráculo, impone a Jasón una misión casi imposible: traer de vuelta el vellocino de Frixo.

Atamante rey eólida de Beocia tuvo dos hijos con Néfele llamados Frixo y Hele.  Su segunda esposa la cadmeide Ino convence a su marido para que sacrifique a los hijos de su primer matrimonio. Los niños se salvan al ser transportados por el aire a lomos de un carnero mágico con el vellón dorado que también tiene la propiedad de hablar.

Crío (o Crisómano) “carnero” es el nombre del ayo de los niños, quien organiza el viaje de Frixo y Hele (Palefato 30). Teófane hija de Bisaltes que, por su gran belleza, Poseidón, al enamorarse de ella, la trasladó a la isla de Crumisa. Sus pretendientes se dirigieron allí en barco. Poseidón transformó a Teófane en una hermosa oveja, él mismo  en carnero y a los habitantes de la isla en un rebaño. Los pretendientes llegaron a la isla, pero al encontrar solo ganado empezaron a matar ovejas para comer. Poseidón, tras observar lo que ocurría, decidió convertirlos en lobos (Ov. Met. VI 117). Poseidón yació bajo la forma de carnero con Teófane, mientras ella seguía bajo la forma de oveja y tuvieron como hijo al carnero de piel de oro que fue el que llevó a Frixo a la Cólquida (Hig. Fab.188).

Hele cae al mar conocido como Helesponto (se convierte en una divinidad marina, Val. Flaco I 415). Frixo alcanza las costas del país de La Cólquida (los colcos utilizan  lana de vellón para extraer pepitas de oro de los ríos, Estrabón I, 2.39). Frixo se casa con Calcíope, hija del rey Eetes. 

La partida de la Argo:

Jasón reúne un grupo de héroes en busca del vellocino de oro. Argos, hijo de Arestor, construye una nave con la ayuda de Atenea con madera sagrada de la encina de Dodona. Jasón se despide de su familia. Su madre Alcímede llora la partida de su único hijo (Ap. Rd. I 288). La anciana Ifíade, sacerdotisa de Hera, besa su mano derecha.

Los argonautas se reúnen en el puerto de Págasas (Magnesia), aclamados por la multitud. Argos Arestórida y Acasto, hijo de Pelías,  son los últimos en llegar. Se produce la elección de líder. Hércules pide que mande el grupo Jasón, el mismo que los ha reunido. Antes de la botadura de la nave se realizan sacrificios en honor de Apolo Ecbasio (protector del desembarco). Hércules y Anceo de Tegea ocupan los asientos del centro para equilibrar la nave. Tifis es el timonel. Los demás tripulantes sortean sus puestos. 

Hércules con su maza y Anceo con su hacha realizan el sacrificio de los bueyes a Apolo. El profeta Idmón realiza la predicción de su muerte en Asia. Durante el banquete, Idas el Afárida bravuconea e insulta a los dioses (Il. IX 558). Idmón replica a Idas y recuerda a los Alóadas. (Enfrentamiento entre guerrero y profeta: en Tebas, Capaneo y Anfiarao, Tebaida III; en Troya, Héctor y Polidamante, Il. XVIII, 243).

Orfeo calma la discusión cantando la teogonía y el mito de la sucesión. Primero surgieron el Cielo, la Tierra y el Mar, separándose a consecuencia de una Discordia. Se ordenaron los astros en el éter, los montes en la tierra y los ríos en el mar. Los primeros reyes fueron Ofión y su consorte la oceánide Eurínome. Fueron sucedidos por Crono y Rea que los precipitaron al océano. Reinaron sobre los titanes mientras Zeus niño vivía bajo la gruta Dictea (En. I 740).

A la mañana siguiente, Tifis es el primero en despertar. El madero parlante de la encina de Dodona les apremia a partir. Los argonautas mueven los remos al son de la lira de Orfeo. Los dioses observan la partida desde el cielo. El centauro Quirón les saluda desde la orilla. Al lado, su esposa sostiene al pequeño Aquiles, hijo de Peleo.

Al salir del golfo pueden extender la vela. Bordean la costa de Magnesia siguiendo la isla de Escíato y la tumba del rey Dólope, hijo de Hermes, a quien los Argonautas ofrecen sacrificios. Bordeando la península de Palene por el cabo Canastro, cambian de dirección hacia el este, pasando junto al Mt. Atos cuya sombra llega hasta Mirina (en Lemnos).


Lemnos:

Lemnos es la primera isla a la que llegan los argonautas (excepto en Píndaro, es una etapa de su viaje de vuelta). Las mujeres de la isla han matado a todos los hombres (Ap. Rd. I, 609) con la excepción del rey Toante, esposo de la creteide Mirina (tía paterna de Jasón), que había sido ocultado por su hija Hipsípila. Se trataba de una venganza de las mujeres por el rechazo de los hombres debido al mal olor con el que Afrodita las había castigado por no querer darle culto. 



Los sintios en consideración a Hefesto, abandonaron el culto a Afrodita cuyo adulterio con Ares se habría producido precisamente en Lemnos. Aquí aterrizó Hefesto, produciéndose su característica cojera, después de haber sido arrojado del cielo por Zeus cuando trataba de ayudar a su madre Hera, colgada del cielo con los brazos encadenados a argollas de oro y un yunque atado a cada pie. Hera junto a Apolo, Atenea y Poseidón intentaron destronar a Zeus (Il. I 397; Val. Flaco Arg. II 82) y adueñarse del Olimpo (encadenaron a Zeus al lecho y le quitaron su rayo) pero el hecatónquiro Briareo liberó a Zeus. Hera sufre castigo similar por enviar una tormenta a Hércules durante la primera guerra de Troya.

Los hombres de Lemnos habían traído mujeres de Tracia como concubinas rechazando el trato con las mujeres de la isla. Las lemnias mataron a todos los varones, esposos, padres e hijos. Hipsípila reina en Lemnos cuando llega la Argo. Las mujeres toman las armas pensando que se trata de piratas tracios.

Etálides, hijo de Hermes es el embajador de los Argonautas por su buena memoria. Etálides después de muerto conservará el privilegio de vivir en la tierra y en el Hades (como Perséfone o los Dioscuros) y también su memoria más allá del río del olvido (como Tiresias). (Diog. Laercio VIII, 4-5, Pitágoras se considera la reencarnación de Etálides). El heraldo convence a Hipsípila para obtener un refugio seguro.

Las lemnias se reúnen en asamblea. Hipsípila propone hacer regalos a los Argonautas de provisiones y vino para que permanezcan fuera de las murallas de la ciudad y se marchen sin conocer el crímen. La anciana Polixo propone acoger a los hombres para tener hijos que trabajen los campos y protejan la isla de los piratas. Hipsípila manda a Ifínoe invitar a los Argonautas entrar en la ciudad como amigos.

El manto de Jasón. 

Jasón viste un manto rojo con el borde púrpura, regalo de Atenea con imágenes bordadas:
- los Cíclopes fabricando el rayo de Zeus 
- Anfión y Zeto levantando las murallas de Tebas 
- Citerea reflejándose en el escudo de Ares 
- la lucha de los teléboas con los hijos de Electrión 
- la carrera de Pélope y Enómao 
- Febo Apolo en su juventud matando al gigante Ticio 
- Frixo y el carnero. 

Toma la lanza obsequio de Atalanta (a quien no permitió viajar en la expedición, según Ap. Rd.).
Ifínoe conduce a Jasón hasta el palacio. Hipsípila cuenta a Jasón la tragedia de las lemnias abandonadas por los hombres, pero omitiendo su crímen. Hipsípila le ofrece compartir el trono de Lemnos.

Los Argonautas se unen a las lemnias, excepto Hércules y unos pocos unos pocos que permanecen en el barco. Celebran un banquete y los ritos de Hefesto, dios tutelar de la isla. La primera relación se establece entre Etálides e Ifínoe.

Pasan los días. En Lemnos se realizan unos juegos fúnebres en honor del rey Toante. Ergino vence en la carrera pedestre a la Boréadas. Las lemnias se asombran de su pelo blanco a pesar de su juventud (Pínd. Ol. IV 29, Ergino es hijo de Climeno de Orcómeno, nieto de Presbón y bisnieto de Frixo).

Hércules se cansa de esperar, recuerda su misión a sus compañeros. Las lemnias se despiden con lágrimas en los ojos. Hipsípila espera el regreso. Jasón le pide que si concibe un hijo, lo envíe a Yolcos con sus padres. Jasón e Hipsípila tendrán dos hijos, Euneo (rey de Lemnos durante la Guerra de Troya) y Toante II (quienes participarán el los Primeros Juegos Nemeos durante la Guerra de los Siete; Estacio, Tebaida V).

Los argonautas toman los remos y navegan hasta la isla de Electias en Samotracia. Aquí son iniciados en los misterios de los dioses Cabiros, protectores de los marinos. Se dirigen al mar negro. En dos días de navegación atraviesan el Helesponto con ayuda del viento Noto. Ven Reteo, la tierra del Ida, Dardania, Percote, la arenosa Abárnide y la divina Piteo.
 

El rey Cícico de los Doliones:

La península de los Osos (Arctoneso) está poblada por los salvages terrígenas, gigantes hijos de la Tierra, provistos de seis brazos. En el istmo de la península habitan los Doliones, donde reina Cícico hijo de Eneo y Enete hija de Ensoro protegidos por el dios Poseidón.

Los argonautas desembarcan por primera vez en el puerto hermoso. Por indicación de Tifis cambian la piedra del ancla y la dejan en la fuente Artacia (los jonios de Mesenia que colonizaron Cícico en s. VII AC la depositaron en el templo de Atenea Jasonia).

Los doliones acogen a los argonautas y realizan ofrendas a Apolo Ecbasio. El rey les obsequia con vino y corderos, dejando en casa a su esposa Clite hija del adivino  Mérope de Percote  (la hermana de Clite, Arisbe es la primera mujer de Príamo y sus hermanos Antifo y Adrasto fallecen en la guerra de Troya a manos de Diomedes, Il. II, 831 y XI 328).

Por la mañana un grupo de argonautas realiza una primera ascensión al Mt. Díndimo para observar la ruta del mar mientras otro grupo traslada la nave al puerto Quito. Las gigantes terrígenas lanzan rocas para bloquear la entrada del puerto de Quito (dique; conducta similar a los Lestrigones, Od.  X 80). Heracles con su arco derriba a los enemigos. Los argonautas derrotan a los terrígenas.

Los héroes vuelven a embarcar. Por la noche, se desencadena un primer temporal que hace regresar la nave. Los argonautas desembarcan por segunda vez en el país de Cízico. En la oscuridad, los Doliones confunden a los argonautas con sus enemigos Macrieos.

Jasón mata al rey Cízico sin reconocerle. Heracles a Telecles y Megabrontes. Acasto a Esfondris. Peleo a Celis y Gefiro. Telamón a Basileo. Idas a Promeo. Clitio a Jacinto. Los Dioscuros a Magalosaces y Flogio. Meleagro, hijo de Eneo, vence a Itimoneo y Ártaces. Los demás huyen como las palomas de los gavilanes.

Al alba los argonautas descubren el cuerpo de Cízico. Durante tres días se celebran los funerales. Se erige un túmulo. Clite, la esposa del rey se ahorca al conocer su fallecimiento. Una fuente lleva su nombre.

Se levanta una nueva tempestad que impide la navegación durante doce días.  El adivino Mopso observa un alción volando sobre la cabeza de Jasón e interpreta el signo. Pide a Jason que ascienda por segunda vez al Mt. Díndimo para aplacar a la diosa Cibeles. Sobre la cima los argonautas realizan sacrificios a Cibeles y a los Dáctilos, Ticias y Cileno. Argos talla una imagen de una vid. Orfeo dirige una danza armada. La diosa complacida hace brotar agua de la fuente jasonia. Las flores germinan y los animales acuden moviendo la cola.

Misia: el rapto de Hilas:

Por la mañana los argonautas abandonan la isla de Cízico. Hércules rema con tanta fuerza que rompe su remo en la desembocadura del río Ríndaco, donde Poseidón levantó el túmulo del gigante Egeón (islote Bebiscos).

Los argonautas llegan a Misia, desembarcan en el Mt. Argantonio atravesado por el río Cío. Los pobladores acogen a los navegantes favorablemente.  Mientras preparan la comida y realizan sacrificio, Hércules se aleja en el bosque en busca de un madero con el fabricar un remo.
El joven Hilas busca agua con un cántaro de bronce para preparar la comida de Hércules (Heracles adoptó a Hilas después de matar a Tiodamante de los Dríopes cuando lucharon por un buey de labranza, según Calímaco).

Las ninfas de la montaña enamoradas secuestran a Hilas. Polifemo Elátida escucha el grito de Hilas y acude en su ayuda. Encuentra a su cuñado (estaba casado con Laónome, hija de Anfión y Alcmena) Hércules en el camino de regreso.  Cree que le han atacado unos bandidos o unas fieras. Comienzan la búsqueda por separado gritando el nombre de Hilas.
Al alba, los argonautas embarcan. Descubren la ausencia de Hércules y comienza una discusión por el abandono de sus compañeros. Telamón acusa a Jasón de querer quitarle la gloria al héroe e intenta obligar a Tifis a regresar. Los boréadas detienen al eácida. (Hércules se vengará de su abandono al matar a los boréadas en Ténos después de la muerte de Pelias).

El dios Glauco sale del mar y se presenta a los argonautas. El destino de Hércules es realizar las pruebas de Euristeo y compartir morada con los inmortales. Hilas es ahora el esposo de una ninfa. Telamón se disculpa ante Jasón: no se enfadó  por riquezas sino por ayudar a un compañero. Polifemo será el fundador de una ciudad en Misia. Hércules después de amenazar a los misios se llevará rehenes de regreso a Traquis.

Bebricia: combate de Amico y Pólux

Amico es hijo de Poseidón y de la ninfa Melia de Bitina. Es un rey que obliga a sus huéspedes a competir en una prueba cuya derrota significa la muerte (similar a Enomao, Sinis, Cerción...). Pólux se presenta voluntario para competir en pugilato.

Licoreo trae unas correas de cuero. Areto y Órnito atan las correas a los puños de Amico. Cástor y Tálao Biantida ayudan a Pólux.

La brutalidad de Amico contrasta con la técnica de Pólux con su hábil juego de  piernas. Pólux derrota a Amico de un golpe detrás de la oreja. El rey Amico fallece (Apd. I, 9.29) o sobrevive y los Argonautas le obligan a respetar a los viajeros (Teócrito, Idilio XXII).

Los Bébrices atacan a los Argonautas. Castor hiere el primero con su espada y mata a Itimoneo y Mimante. Orites hiere a Tálao. Areto golpea a Ífito de Éurito. Clitio mata a Areto. Anceo de Licurgo, los Eácidas y Jasón se unen a la lucha.
 
Castigo de Amico, Museo de Louvre
Lico y los Mariandinos al descubrir la derrota de Amico invaden el país de los Bébrices (Hig. Fab. XVIII).

De noche, los Argonautas celebran la victoria de Pólux y realizan sacrificios. Orfeo canta.
Al salir el sol, embarcan hacia el Bósforo. Tifis el timonel esquiva una gigantesca ola. Los Argonautas llegan a la tierra de Tinia.


Tinia: Fineo y las Harpías:

Fineo hijo de Agenor o hijo de Fénix, el hijo de Agenor antiguo rey de Salmideso (Tracia). Casado con Cleopatra, hija de Boreas y de Oritia (hermana de los Boreadas) y después con Idea, con quien tuvo a Mariandino. 

Castigos de Fineo:

Fineo es un profeta cegado por los dioses:

- Zeus por revelar el futuro a los hombres (Apod. I, 9.2). No les gusta a los dioses que se revelen a los hombres demasiados de detalles sobre su futuro porque de esta manera,  los hombres se desentienden de los dioses al no tener incertidumbre sobre su porvenir.

- Zeus por su crueldad al cegar a los hijos de su primera mujer instigado por la malvada madrasta Idea, hija de Dárdano (Sóf. Antig. 973; Arg. Orf. 671; Diod. IV 44).  Idea había acusado a sus hijastros de intentar violarla (tema de Putifar/Hipodamia y Mirtilo o Hipólito y Fedra, sin el rechazo). y atormentado por las Harpías.

- Poseidón por haber mostrado a los hijos de Frixo el camino de retorno desde la Cólquide.

- Helios por haber preferido el don de la profecía antes que la capacidad de ver.

El segundo suplicio de Fineo es el acoso de las Harpías:

Las harpías son unos monstruosos hijos de Taumante y Electra (Teog. 265). Son tres seres alados de apariencia demoníaca, con cabeza y patas de gallina, alas con brazos y largas uñas, muslos, vientre y pecho humano. Son llamadas Nictoe o Aelope, Celeno y Ocipete. Homero añade el nombre de la harpía Podarge, madre de Janto y Balio, caballos de Aquiles (Il. XVI, 149). Cuando los vecinos dejan manjares a cambio de los vaticinios de Fineo, las harpías se los arrebatan y dejan un hedor insoportable.

Los Argonautas encuentran a un envejecido y demacrado Fineo sentado ante la puerta de su casa. El anciano profeta implora en nombre de Zeus protector de los suplicantes, de Apolo quien le concedió el don de la adivinación y de Hera protectora de los Argonautas que le liberen de la maldición de las Harpías.

Fineo predice la derrota de las Harpías por los Boreadas. Jura por Apolo, la Ker (el hado) y los dioses del Infierno que no sufrirán venganza divina por ayudarle.

Calais y Zetes, dotados con alas en las espaldas (Ovidio) o en los pies y en la cabeza (Higinio) además de pelo azul celeste, persiguen por el cielo a las Harpías. Sobre las Islas Estrófadas (del retorno) las Harpías juran no volver a molestar a Fineo. Los Bóreas son obligados a dar la vuelta por Hermes (Hesíodo) o por Iris (Apolonio). El destino de las Harpías es incierto: Nictoe vuela hasta el Peloponeso y cae junto al río Tigres que desde entonces se llama Harpis (Apolodoro), vuelan desde el mar Egeo hasta Sicilia y se refugian en Creta en una cueva del monte Argimunte (Ferecides) o llegan hasta el monte Vesubio donde son salvadas por su padre Tifoeo (Valerio Flaco).

Predicciones de Fineo:

Los Argonautas preparan un banquete en casa de Fineo. El profeta indica los peligros del viaje a la Cólquide aunque sin dar demasiados detalles.

Las Rocas Cianeas que cierran el estrecho y se golpean una contra otra con fragor. Fineo recomienda mandar delante una paloma. Si el ave no consigue atravesar el paso antes de que se cierre, deben regresar porque no podrían escapar ni aunque su nave fuera de hierro.

Si consiguen pasar el estrecho, frente a la tierra de los Bitinios, pasando el río Reba y el cabo Negro, llegarán a la isla de Tinia. Pueden desembarcar en la tierra de los Mariandinos donde desemboca el Aqueronte, río del Infierno. Cercase encuentran las colinas de Paflagonia, donde reinó Pélope sobre los eneteos. Doblando el cabo Carambis que mira al Norte, se extiende una gran costa. Pasando el cabo Lepte, el gran río Halis y el pequeño río Iris, llegan a la desembocadura del río Termodonte bajo el monte Temiscira, donde se encuentra la llanura Deante y las tres ciudades de las Amazonas. Después se hallan las tierras de los pobres Cálibes que son herreros y los ricos Tiberenos que son ganaderos. Pasando el promontorio de Zeus Geneteo, habitan los Mosinecos que construyen sus casas sobre madera.

Llegan a la isla desierta donde Otrera y Antíope elevaron el templo de Ares. Los pueblos de los Filires, Macrones, tribus de Bequires, Sapires y Biceres. El siguiente es el pueblo de los Colcos. Deben desembarcar en la orilla del río Fasis. Desde aquí se puede ver las murallas de la ciudad de Eetes y el bosque de Ares, donde el dragón insomne custodia el vellocino.

Parebio:

Por la mañana, la gente del pueblo lleva comida a fineo a cambio de escuchar sus vaticinios. Fineo pide a Parebio un cordero.

El padre de Parebio había cortado el roble de una ninfa hamadríade de su misma edad y por ello sus hijos fueron maldecidos. Fineo aconsejó a Parebio construir un altar a la ninfa Tinia y realizar sacrificios. Desde entonces el agradecido Parebio cuida de Fineo y le sirve.

Parebio trae dos corderos. Los Argonautas comen y descansan junto al río.

Los vientos Etesios:

Al alba, soplan los vientos Etesios. El origen de estos vientos se encuentra en las oraciones de Aristeo para aliviar el calor en el momento más cálido del verano. Apolo raptó a ninfa Cirene hija de Hipseo (Diod. IV, 81.1; Dionisíaca 29.179) o de Peneo (Hig. Fab. 161) y la llevó desde Hemonia (Tesalia) donde discurre el río Peneo hasta Mirtoso en Cirenea. Aquí tuvo a Aristeo que fue criado por Quirón. Aristeo casado con la cadmeide Autónoe es padre del cazador Acteón. Aristeo pastoreó la llanura de Atamante a orillas del Apidamo y el Mt. Otris. Apolo llamó a su hijo a Parrasio en la isla de Ceos cuando Sirio arrasaba las islas de Minos. Aristeo hizo sacrificios a Sirio y a Zeus lluvioso y por eso los vientos etesios enfrían la tierra durante 40 días. En Ceos los sacerdotes siguen celebrando sacrificios antes de la salida de Can (canícula) como agradecimiento. Estos vientos del Noroeste impiden a los argonautas la navegación por el Bósforo. En ese tiempo, los tinios envían a los Argonautas regalos de hospitalidad.


El paso de las rocas Simplégades:

Antes de partir, los Argonautas levantan un altar en honor de los 12 dioses olímpicos. Atenea los observa desde el Olimpo y viaja a la costa de Tinia.

En la entrada del Ponto se encuentran las rocas movedizas. Eufemo suelta una paloma. Las rocas cierran el estrecho y cortan las últimas plumas dorsales de la paloma. Los remeros gritan de alegría al ver que ha conseguido pasar. La nave penetra en el estrecho cuando las rocas se separan. Atenea empuja la nave con una mano mientras aguanta las rocas con la otra. La nave pierde los últimos adornos de la popa. Una vez superadas,  las rocas permanecen inmóviles para siempre.

Tifis el timonel da las gracias a los dioses por la ayuda de Atenea. Diaporía de Jasón (similar a la diaporía de Agamenón II, 110): lamenta haberlos conducido a un viaje lleno de peligros sabiendo que su orgullo despertará en ellos emociones contrarias. Los argonautas le aclaman. Jasón se alegra por dentro.
Navegan pasando el cabo Reba, el cabo Negro y la desembocadura del río Fílide. En este lugar, el pastor Dípsaco, hijo de Fílide y una ninfa, acogió a Frixo cuando huía de Orcómeno sobre el carnero dorado.

Los argonautas sobrepasan el río Calpe. Reman día y noche sudando como los bueyes que surcan el campo.

La isla de Tinia:

Desembarcan en una isla desierta frente a la costa de Tinia. Encuentro con Apolo que regresa de Hiperbórea. Los argonautas bajan los ojos para no ver al dios. Orfeo propone llamar a la isla Apolonia en recuerdo de la teofanía. 

Los argonautas realizan sacrificios y libaciones.  Orfeo canta la victoria de Apolo sobre Delfine (Pitón). Los argonautas levantan un santuario a Concordia.


Fineo y los Boreadas, Louvre


Lico y los Mariandinos:

Al tercer día de navegación llegan a la boca del río Sangario donde empieza la tierra de los Mariandinos. Desembarcan en el puerto del cabo Aqueronte donde desemboca el río del inframundo en la caverna de Hades. En este lugar, los megarenses de Niso y los beocios fundaron la colonia de Heraclea Póntica.

El rey Lico invita a los argonautas a un banquete en su palacio. Jasón cuenta sus aventuras. El rey Amico lamenta la pérdida de Hércules. Recuerda sus hazañas en la corte de su padre Dáscilo cuando Heracles buscaba el cinturón de la reina Hipólita (9ºtrabajo). En los juegos fúnebres de Priolas hermano de Lico muerto en la guerra de Misia, Heracles derrotó a Ticias. Sometió a los Migdones, mató al rey Migdón, hermano de Amico y derrotó a tribus de Bitinios y a Paflagones. Cuando Heracles abandonó esas tierras, los Bébrices de Amico se revelaron y ocuparon el territorio del río Hipio. 

Lico agradece a Pólux la derrota de Amico. Promete construir un santuario dedicado a los Tindáridas y ordena a su hijo Dáscilo que se una a la expedición.

Muerte de Idmón y Tifis:

Por la mañana, cuando se disponen a embarcar con los regalos del rey Lico, un gigantesco jabalí que habitaba a orillas del río, ataca al adivino Idmón. Peleo arroja su lanza. Idas mata al animal. Idmón fallece a consecuencia de su herida en brazos de sus compañeros. Durante tres días de luto es llorado.  Levantan un túmulo coronado por un rodillo (Hércules levanta dos estelas en la tumba de los Boréadas, Argonautica I 1302; los griegos clavan un remo sobre el túmulo de Elpénor, Od. XI 74). En este lugar, los megarenses y los bocios de Heraclea Póntica honran al héroe Agaméstor. 

Tifis el timonel sufre una corta enfermedad y fallece. Los argonautas están moralmente decaídos. Anceo, hijo de Poseidón y Astipalea, después de hablar con Peleo, se presenta voluntario para manejar el timón y también Egino, Nauplio y Eufemo.

El fantasma de Esténelo Actórida:

Doce días después de llegar a la tierra de los Mariandinos, los argonautas consiguen embarcar con la ayuda del viento Céfiro. Llagan a la desembocadura del río Calícoro donde se encuentra la gruta Aulión donde descansó Dioniso al regresar de la campaña de la India.

En este lugar se encuentra la tumba de Esténelo Actórida, fallecido por una herida de flecha durante la campaña de Hércules contra las Amazonas. El fantasma de Esténelo con permiso de Perséfone abandona el Inframundo. Subido a un túmulo observa a sus compatriotas. El profeta Mopso pide a sus compañeros realizar libaciones y sacrificios por el guerrero. Los argonautas construyen un altar dedicado a Apolo. Orfeo deja aquí su lira en ofrenda.

Sopla el viento y la Argo cruza la desembocadura del río Partenio, asi llamado por Artemis. Por la noche atraviesan la costa de Paflagonia y llegan a Asiria a orillas del río Halis. En esta tierra se estableció la ninfa Sinope, hija del río Asopo que consiguió engañar a Zeus y permanecer virgen (Ap. II, 947; Val. V, 109).

Los hijo de Deímaco de Trica:

Los argonautas encuentran a los hijos de Deímaco de Trica: Deilonte, Autólico y Flogio que acompañaron a Heracles en la expedición contra las amazonas. Se unen a los argonautas.
Doblan el cabo Temiscira en el lugar donde Heracles secuestró a Melanipe y recibió como rescate el cinturón de su hermana Hipólita para la hija de Euristeo. En un amplio golfo desemboca el río Termodonte formando 96 brazos.

Las amazonas ocupan la llanura Deante y el bosque Almon. Divididas en tres pueblos dirigidos por Hipólita, Licasto y Cadesia la flechadora. Zeus impide una guerra entre argonautas y amazonas al ordenar al viento Argestes que aleje la nave del promontorio.

Al día siguiente viajan por la costa de los Cálibes que se dedican a la extracción de hierro. Al pasar el cabo de Zeus Geneteo, la tierra de los Tibarenos que practican el rito de la covada (como en Córcega según Diod. S. V 14.2 y en el N. de Iberia según Estrabón III 4,17). Después del Mt. Sagrado la tierra de los Mosinecos que viven en mosinas, casas sobre postes de madera y practican costumbres opuestas a los griegos, comparten el lecho en público y tienen un rey que imparte justicio pero cuando se equivoca es encerado y castigado sin comer.

Isla de Ares: los hijos de Frixo:

A la mañana siguiente los Argonautas llegan a la isla de Ares. Un ave lanza una pluma y se clava en Oileo que permanece herido como si fuera una flecha. Eribotes venda su herida. El arquero Clitio Eurítida lanza una flecha contra las aves. Anfidamante recuerda cuando Heracles ahuyentó a las aves nadadoras del lago Estínfalo en Arcadia utilizando un crótalo de bronce. Propone desembarcar haciendo ruido y proteger a los remeros con escudo de forma parecida a los Curetes (Hig. Fab. XXI).

Los cuatro hijos de Frixo (Argos, Citisoro, Frontis y Melas/Melanión; Apolonio no cita a Presbón) en su viaje de regreso desde Cólquide a Orcómeno fueron arrojados a la orilla por causa una tempestad agarrados a un madero. Argos se acerca a Jasón y recuerda la historia del carnero al que Hermes cubrió de oro (Ap. Rd. Argonautica II 1145), la boda de Frixo y Calcíope hija de Eetes y el sacrificio del carnero cuyo vellón dorado cuelga de la rama de una encina en el bosque de Ares. Jasón los reconoce como parientes porque su abuelo Creteo era hermano de Atamante, padre de Frixo. Les entrega ropa. Realizan sacrificios en el templo de Ares, donde se encuentra la Piedra Negra a quien las Amazonas realizan sacrificios de caballos.




Pide a los hijos de Frixo que les sirvan como guías para calmar la venganza de los dioses y reconciliar a las dos familias de los eólidas.

Argos previene a Jasón de los peligros,  la crueldad de Eetes y el dragón que custodia el Vellocino. Peleo afirma que si el rey no entrega pacíficamente el vellón dorado, los argonautas lo tomarán por las armas.

Navegación hasta La Cólquide:

Por la mañana abandonan la isla de Ares en dirección a la isla de Fílira. En esta isla, la diosa Rea descubrió el engaño de Crono con la oceánide Fílira en los tiempos en que Zeus se criaba en la caverna del Mt. Ida. Crono huyó metamorfoseado en caballo. Fílira se refugió en las montañas de los Pelasgos, donde fue madre del centauro Quirón (Ap. Rd. II, 1241).

La nave cruza delante de las tierras de Macrones, Bequires, Sapires y Bíceres hasta ver las montañas del Cáucaso. Los argonautas observan el vuelo  de un águila monstruosa y poco después oyen el grito de dolor de Prometeo.

En la desembocadura del río Fasis, a un lado queda la cordillera del Cáucaso y la ciudad de Ea y al otro lado la llanura y el bosque sagrado de Ares. Jasón realiza libaciones por las almas de los difuntos.

El timonel Anceo anuncia a sus compañeros la llegada a La Cólquide. Jasón, siguiendo los consejos de Argos, oculta la nave en una laguna.